Melancolias

¿Cuando me vas a corregir la plana? Y poner algunas letras a tu favor así como ese diciembre piadoso que me arrancaba las luces de enero, decime así con voz suave que te vas, no es justo que despertemos las páginas de amor a futuro que descansan el cuaderno. Ya no te tengo, ahora mi balsa corta aguas diferentes, como aquel loco desierto que poblamos con bosques en nuestro camino, que cenizas más tristes esas que dejaste en el deja vu rojizo… Mírame cuando te marchas soy ese destino ajeno, que alegría la de la tristeza sacude el paño blanco del velero que te conduce, ahí deje de ser capitán desde hace mucho, desde hace nunca…
Sostengo algunas críticas con dislexia, pero ese ejercicio no me compete, alguna vez caeré, si no es que ya eh estado en esa palestra, digo esto por mis ojos falsos que miran esta realidad como si nada, como si no les faltara nada, te llevaste mi cornea, mi pupila, mis pestañas amarradas a tu sombra, pero aun peor, mis ojos de amor.
Mis silabas cortadas de desenfreno indagaron más allá de lo pensado, pero a decir verdad: ¿te extraño a ti o aquel que fui ? Y como lo dijo Sabina. “Ahórrate el acuse de recibo”
Wilfredo Arriola