miércoles, 27 de enero de 2010

Superfluo

No sé me da ahora andar a tientas buscando la felicidad, ni recortar en el periódico alguna frase que me aniquile el sentimiento, justo ahora que empaco la osadía de largarme sin algo más o menos piadoso. Con este “pero” no quiero anular lo antes vivido, pero si quiero solventar el pecado de testificar la escena a 4 manos que fabricamos sin sospechar que sería superfluo, superfluo el tiempo, los caramelos, las llamadas, las reservas en cualquier café, las compras en el dispensador, las horas perdidas, las ganadas, las injustas…este escrito…superfluo…

Ojala no fuera Wilfredo Arriola...

domingo, 24 de enero de 2010

sábado, 23 de enero de 2010

Carta a un amigo en procesos de reconciliación...

2 de Octubre 2009

Para vos:
Sé que tus noches ya tiene nombre.
y que los días venideros tendrán una buena excusa para vivirlos,
que los besos ya tienen su espacio comprado en los labios que parecían ajenos
Y que en realidad nunca lo fueron…
Solamente esperaban la palabra precisa
y el atrevimiento justo
ese de secuestrar la humildad en palabras
bien sabias que la metamorfosis duraría poco
convirtiéndose sus manos en las agujas de tu reloj
¡Qué prisión más bendita!
atarse a la cordura de sus besos
y alejarse de las palabras huecas de la noche.
Sé que ahí has estado
me alegra por vos,
y por el ripio de cosas que sabes,
y que no está demás
seguirle buscando el buen sazón a la soledad
que como vos y yo sabemos
ha estado en los malos y en los buenos momentos
burlándose del traspié injusto del tiempo…
que el tiempo se puso la máscara de amigo
cierto es…
que ahora los “19 días y 500 noches ya no son los que parecen”
respeto le debes a las páginas en su nombre
sus borracheras desde tu boca
sus "fitness" que nunca tuviste
sus cartas que le hiciste...
Seria justo que las mostraras en son de culpas inéditas
a la vez de recitárselas así con esa voz
de truhan literario
según las cuartillas llorosas que suplicaban
que sé yo…
quizás este momento...
Injusto contra las odas ya olvidadas
justo también es despedirse
de la poesía luctuosa
que apadrinabas
y que me dejas a cargo
a manos llenas de quejas contra el infortunio de las lagrimas
sabré consolarlas lo veras...
Siempre me sobra una que otra
historia de las que tú sabes y te las guardas
y por “Don Reservas” acallas en el baúl castrado de verdad.

No está de más decir
que los tragos que están pendientes,
siguen en pie…
porque ni vos ni yo…
estamos para el oficio de
lejanos-cercanos
sé desmedidamente que
el juego de escribir y de soñar el mismo sueño
rayado está
y que las pilas ya ni daban
para seguir el crucigrama bohemio
del trasnoche acostumbrado.
no daban ni para
otra alegría que no fuera el mismo penar
y no dejaremos a un lado la puta “razón”
que compartíamos casi siempre
discutiendo “porqués“ y “hubieras”
no me remito al hecho
de decir que somos más
de lo que fuimos.
no…
y tú bien sabes porque…
Entérate que siento alegría ajena por vos
y sé que tu mente me ha de apoyar
lo sé…
Ahora que tus páginas
lloraran por la tinta que se despide,
mientras reciben el polvo de tu buró
Ojalá no…
Y sigan tus letras
que son las mejores acompañantes
ante el sosiego.

No me resta decir
que me encontraras
ahí donde se fusilan las ilusiones
esas que te arrancan la mesura
trataremos más
Ojalá, ojalá
En hora buena a vos te digo
Que las cosas te siguan surtiendo el destino que te mereces.

Dos Abrazos, cuando más los necesites.

Wilfredo Arriola



sábado, 16 de enero de 2010

Letras Sangradas


Mis manos sufren de abandono
al verse vacías de ausencia.
Cuanto trauma dejaste impregnado
en las tardes de septiembre

 que jubilan el tacto de tu sombra con la mía
mi cuerpo está cansado de aparear recuerdos
por la singularidad que dejaste.
¿Acaso pago los minutos prestados?
¿Acaso tu ocaso alumbra otros almas foráneas?
Mi respirar esta esquirlado
por las lancetas que florecen de tu mirada
ya mi desolación se acordono de fatalidad
mis copas ultrajan tu prudencia
cuando fuiste algarabía entre mis glorias
detesto en nombre del olvido:
Los aniversarios
Los besos en la plaza
Las llamadas nocturnas
Tus ojos en otros ojos
Mi odio disfrazado de condena.
Ahora solo quédate
Y permuta mis tantos sentires
Tal vez muero vacio
Y le enciendas la vela
A mis tristes males.

( Para vos, que ni nombrarte vale la pena) San Salvador 2 Septiembre 2006.
Wilfredo Arriola

viernes, 15 de enero de 2010

Crónica Escondida


En algún lugar dejaremos de existir
sacaremos la lumbre
del escondite que nos aguardamos
en algún lugar mi brisa soplara tus labios
dejaremos de fundirnos en el silencio
tú cuerpo será otra palabra en nuestro universo de sentimientos
en algún lugar desaparecerá ese deseo
convirtiéndose en realidad.


Quizás en ese lugar nuestros abrazos
se condensaran en un suspiro,
en un gemido
quizás con un aliento
junto a tu boca.

Quizás en algún lugar destrozaremos las ganas
mordiéndonos en la cama,
muriéndonos entre el sudor de mis instintos
implacables los momentos
que me suministro a tu ser
donde tus mundos
destruirán la plaga de mi ironía
¿A que jugamos hoy?
A olvidarnos de la metáfora de la vida
o a la confección de nuestra historia…


Wilfredo Arriola